El sevillano es un pulmón que alimenta sus esfuerzos gracias a su juventud y su eterna sonrisa. Viéndole correr por la banda te das cuenta de que disfruta de su profesión como pocos. El lateral derecho parece que será suyo. Sin embargo, no sería raro verle jugar también como central si las lesiones o necesidades de Pellegrini así lo requisieran.
Álvaro Arbeloa es otra de las incorporaciones para la defensa. Supone la vuelta de un futbolista criado en la antigua Ciudad Deportiva. Los cinco millones de euros que se han pagado al Liverpool le suponen al Madrid un plus de polivalencia. El internacional español puede adaptarse perfectamente a las dos bandas. Incluso también puede jugar de central.
El último de los centrales que tiene en la plantilla Pellegrini es Garay. Aunque fue fichado el verano pasado, se prefirió que siguiera jugando en el Racing de Santander para que fuera ganando en experiencia. Su rendiemiento es todavía una incógnita. Su mejor virtud es la colocación y la salida que da al balón. Su mayor inconveniente es que parece un poco lento para el sistema defensivo de riesgo con el que juega el Madrid.
El lateral izquierdo debería de ser, a priori, para Marcelo. El internacional brasileño tendrá que aplicarse más defensivamente para convertirse en el relevo natural de Roberto Carlos. La temporada pasada despuntó jugando como extremo izquierdo, lugar en el que quedó reflejado la facilidad que tiene para marcar y dar asistencias a sus compañeros. Aún no ha debutado en la pretemporada debido a unos problemas musculares. Su rival por el puesto es Drenthe, un futbolista del que aún se busca conocer sus cualidades.
Imagen: Bajo licencia CC