Rafa Nadal, tenía un rival de esos que se suele decir incómodos y que si tiene su día te puede dar más de un susto, el chipriota Marcos Baghdatis. El número uno del mundo no da concesiones a ningún rival y desde el primer momento salió con la intención de imponer su juego y no dar lugar a la sorpresa. Tal como hemos visto en Montecarlo y Barcelona, Rafa comenzó muy fuerte desde el fondo de la pista con derechas muy profundas y duras. De esta manera, nada más comenzar el set pudo romper el saque de Baghdatis. El dominio fue total del español, que volvió a romper el saque de su rival en otras dos ocasiones para acabar imponiéndose por un claro 6-1. La segunda manga ofreció poca variación, e incluso Nadal se pudo relajar un poco pensando en el duro partido que le espera hoy. Al final , 6-2 y a esperar a un renacido Juan Martín del Potro. El argentino está recuperando las sensaciones que le llevaron a estar entre los mejores tenistas del mundo, como demuestra su victoria contra Marin Cilic por 6-3, 6-0.
Por su parte, el serbio Novak Djokovic sigue acumulando victorias y tras la victoria contra el sudafricano Anderson eleva su número de victorias seguidas a 30, 28 en lo que va de temporada. Ahora mismo, parece que sólo Nadal puede romper esa racha de imbatibilidad. En su primer partido en Madrid no tuvo que forzar la máquina y le bastó con forzar en los momentos decisivos y su potente saque para imponerse por 6-3,6-4. En octavos de final tendrá como rival a Guillermo García-López.
Por último, el suizo Roger Federer tuvo un durísimo partido, e incluso tuvo que levantar una bola de partido contra el español Feliciano López. Increíble partido el jugado por el tenista toledano, que demuestra que concentrado puede luchar contra cualquier rival. Con un saque muy poderoso y unas derechas de gran potencia tuvo opciones de victoria en todo momento. El español cometió muy pocos fallos, y a pesar de que Federer realizó un gran partido en ningún momento tuvo sus típicos bajones que le sacan del partido.
El primer set, que tuvo que dilucidarse en el tie-break fue un fiel reflejo de lo que fue el partido. Máxima igualdad y una gran emoción hasta el final. En la primera manga, Feliciano tuvo hasta cuatro bolas de sets en ese juego decisivo, pero fue el suizo el que se llevó al final el gato al agua. La segunda manga volvió a decidirse con otro tie-break, cayendo esta vez del lado español. Igual suerte corrió el tercer y definitivo set. Parecía que por primera vez Feli se iba a imponer al suizo, cuando tuvo bola de partido. Pero el suizo demostró mayor experiencia y acabó remontando y llevándose la victoria. Partidazo lleno de calidad que se fue hasta casi las tres horas.
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