

Conviene acudir a nuestra piscina municipal más cercana para informarnos acerca de sus horarios y sobre sus precios, ya que en cada ciudad hay diferentes normativas y costes. Normalmente, las personas empadronadas en un municipio cuentan con descuentos y también hay abonos de 10 usos con mejores precios que para quienes no están empadronados.
Hay diferentes precios según la edad, ya que por ejemplo los niños y los jubilados pagan menos. También hay abonos de temporada para los bañistas que quieran acudir a diario a la piscina, y hay diferentes deducciones para familias con ingresos inferiores al doble del Salario Mínimo Interprofesional.
Los horarios de las piscinas también pueden variar, generalmente abren desde a primeras horas de la mañana hasta las 20 o 22 horas aproximadamente, y los fines de semana suelen tener un horario más amplio.


Precauciones básicas en las piscinas
A la hora de darnos un baño en la piscina municipal como cada año conviene tener en cuenta precauciones básicas como las siguientes: la importancia de saber nadar, bañarse en zonas vigiladas por socorristas, respetar la normativa, no bañarse tras haber ingerido alcohol y salir inmediatamente del agua si se siente dolor de cabeza, calambres, escalofríos o vértigo.
En las piscinas municipales es importante usar el calzado adecuado (chanclas y zapatillas de goma) que debemos de utilizar sobre todo en zonas húmedas expuestas al sol pues es donde hay más cría de hongos. Siempre debemos andar con ellas tanto cuando nos acercamos a la piscina como en los vestuarios o duchas. De todos modos, es recomendable darnos una ducha antes y después de meternos en el agua para eliminar posibles microorganismos.