Aprovecharon la pretemporada para sacar el máximo partido de las ventajas de su doble difusor y ahora viven de las rentas del trabajo bien hecho. En el Principado siempre se viven carreras emocionantes y llenas de magia. Es el fin de semana más emblemático del campeonata y cualquier piloto sueña con inscribir su nombre en un palmarés en el que sólo aparecen los más grandes. Airton Senna, con siete victorias, y Graham Hill y Michael Schumacher, con seis, encabezan el ránking de victorias de la prueba. La carrera sirvió para comprobar que Ferrari ha vuelto a convertir su monoplaza en competitivo. El tercer puesto de Kimi Raikkonen les sirve a la escudería italiana para subir por primera vez en todo el año al podio. Lamentablemente, parece que ya es demasiado tarde y que lo que hagan a partir de ahora servirá para maquillar una mala planificación deportiva que terminará, según apuntan todas las previsiones, en la marcha del finlandés. Por su parte, Fernando Alonso terminó en una decepcionante séptima plaza que sirve para reflejar que el R29 no es un coche competitivo. El piloto asturiano no pudo hacer más. Hizo una carrera perfecta, sin fallos, pero insuficiente para hacer algo importante en un Gran Premio que ya ha ganado dos veces. Alonso se empieza a cansar de no luchar por las victorias. Flavio Briatore ya no le puede vender más la moto. Si nada ni nadie lo remedia, el español terminará la próxima temporada en Ferrari. Desde los medios de comunicación italiano le reclaman para que vuelva a hacer competitivo al caballo rampante. Pero para el próximo año, aún falta mucho. Demasiado... Imagen de WikipediaButton gana el Gran Premio de Mónaco
26 mayo 2009 | Por luismipalacios
Jenson Button dio un paso de gigante en sus aspiraciones por ser campeón del mundo de Fórmula 1. El inglés dominó el Gran Premio de Mónaco de principio a fin, sin rivales capaces de inquietarle lo más mínimo. Su monoplaza no corre, vuela.
Aprovecharon la pretemporada para sacar el máximo partido de las ventajas de su doble difusor y ahora viven de las rentas del trabajo bien hecho. En el Principado siempre se viven carreras emocionantes y llenas de magia. Es el fin de semana más emblemático del campeonata y cualquier piloto sueña con inscribir su nombre en un palmarés en el que sólo aparecen los más grandes. Airton Senna, con siete victorias, y Graham Hill y Michael Schumacher, con seis, encabezan el ránking de victorias de la prueba. La carrera sirvió para comprobar que Ferrari ha vuelto a convertir su monoplaza en competitivo. El tercer puesto de Kimi Raikkonen les sirve a la escudería italiana para subir por primera vez en todo el año al podio. Lamentablemente, parece que ya es demasiado tarde y que lo que hagan a partir de ahora servirá para maquillar una mala planificación deportiva que terminará, según apuntan todas las previsiones, en la marcha del finlandés. Por su parte, Fernando Alonso terminó en una decepcionante séptima plaza que sirve para reflejar que el R29 no es un coche competitivo. El piloto asturiano no pudo hacer más. Hizo una carrera perfecta, sin fallos, pero insuficiente para hacer algo importante en un Gran Premio que ya ha ganado dos veces. Alonso se empieza a cansar de no luchar por las victorias. Flavio Briatore ya no le puede vender más la moto. Si nada ni nadie lo remedia, el español terminará la próxima temporada en Ferrari. Desde los medios de comunicación italiano le reclaman para que vuelva a hacer competitivo al caballo rampante. Pero para el próximo año, aún falta mucho. Demasiado... Imagen de Wikipedia
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