

El renovado Real Madrid, con Rudy a la cabeza como principal estrella, buscaba la revancha en el partido de ayer noche correspondiente a la segunda jornada de la Liga Endesa. Pero, nuevamente, los blancos volvieron a caer en los mismos errores y comenzaron el partido con una alarmante falta de concentración lo que provocó que el equipo local infringiese un parcial de 14-0 de salida ante la desesperación de Pablo Laso. El Madrid daba una imagen en esos minutos que rozaba el ridículo más absoluto. Mientras los locales, con una afición entregada, se divertían con un juego ofensivo y muy alegre.
Era obvio que los merengues tenían que reaccionar y así, sin muchos alardes, poco a poco fueron entrando en el partido y recortando distancias. Pero el Bizkaia Bilbao Basket mantuvo ya el mando en el marcador durante todo el partido, gracias al gran acierto, entre otros, de Raúl López (11 puntos), que hizo lo que quiso con un descentrado Sergio Rodríguez , Kostas Vasileiadis (18 puntos), Banic (13) y Mumbrú (15 puntos). En el Madrid el mejor Felipe Reyes (18 puntos y 7 rebotes) y también buen partido de Rudy Fernández (17 puntos y 5 rebotes) y Ante Tomic (17 y 5). El resto del equipo estuvo a un bajísimo nivel.
En la segunda parte el BBB llegó a alcanzar hasta 19 puntos de diferencia, pero Laso estalló y cantó las cuarenta a sus hombres en un tiempo muerto, que les hizo reaccionar y mejorar bastante, lo que provocó un parcial de 2-15 que metió de lleno en el partido al Madrid. Pero los locales mantuvieron la calma en todo momento y con un gran acierto desde la línea de personal pudieron mantener a raya a un rival que tenía que claudicar. Al final, 86-82 para los locales, que ayer demostraron que, a pesar de las bajas que tenían, con ganas y jugando en equipo se puede ganar a cualquiera. El Madrid, salvo por el intento de remontada, dejó una imagen muy triste y parecida a lo que vimos el año pasado.
Imagen de Juan Echeverría