

Los estiramientos son la base del running
El running puede llegar a ser una actividad física muy exigente. Incluso cuando trotamos a un ritmo suave, las articulaciones y la musculatura se someten a fricciones y cambios de ritmo que, si no tenemos cuidado, pueden pasarnos factura, sobre todo a medida que vamos cumpliendo años. En la adolescencia y cuando tenemos 20 años nuestro cuerpo parece que responde a todas las barbaridades que somos capaces de proponerle, sin embargo, al alcanzar los 30 empiezan a saltar las alarmas: aparecen dolores, molestias, lesiones… Es imprescindible que realices estiramientos durante unos 10 minutos antes de empezar la carrera para preparar la musculatura de cara al ejercicio, prevenir lesiones y rendir mejor. Al terminar, no te olvides de volver a estirar otros 10 minutos, lo que te ayudará a soltar y oxigenar la musculatura y a tener una recuperación más eficiente y rápida. Estas prácticas repercutirán en tu rendimiento a largo plazo, ya que ayudarán a alargar tu vida deportiva durante muchos más años.
Ropa y calzado deportivos
Aunque se puede salir a correr de cualquier manera, si vas a tener una rutina, lo ideal es que inviertas en ropa y en calzado para una mayor comodidad y también por salud. Existen amplios catálogos de ropa para eventos deportivos en los que encontrarás pantalones perfectos para la carrera y camisetas ligeras y transpirables que marcarán la diferencia en tus sesiones. Hacerte con el calzado adecuado es fundamental para cuidar la salud de tus pies, que son tu punto de contacto con la Tierra y los que te dan equilibrio y balancean todo tu cuerpo.
Aumenta progresivamente las cargas de trabajo
No pretendas convertirte en un maratoniano de la noche a la mañana, especialmente si vienes de llevar un modo de vida sedentario. Lo idóneo es empezar poco a poco. Puedes empezar a correr 15 minutos al día durante una semana y aumentar 5 minutos a la semana. ¡En un mes estarás corriendo 30 minutos! Del mismo modo empieza con un ritmo suave. A medida que veas cómo avanzas podrás ir aumentando el ritmo en tus sesiones. Lo importante no es cuánto tiempo y a qué velocidad corres, sino crear el hábito de salir a correr. Lo demás llegará a su tiempo y caerá por su propio peso. Si tienes la posibilidad, déjate asesorar por gente con experiencia e, incluso, contrata los servicios de un entrenador personal.
Evita salir a correr en momentos críticos de temperatura
Por salud, nunca salgas a correr en momentos en los que la temperatura sea muy elevada, puesto que podrías sufrir un golpe de calor. Si es verano, sal a primera hora de la mañana o espera a que caiga la noche y, por supuesto, evita las horas centrales
Me gusta mucho lo que es la información para practicar lo que es el running y también para el conocimiento.