Nicolás Almagro, después de una gran semana, se presentaba en la final con la intención de ratificar su condición de máximo favorito de un torneo que conoce muy bien, ya que fue campeón en el año 2008. Enfrente el joven tenista ucraniano Aleksandr Dolgopolov, que ha hecho un gran torneo, demostrando que es uno de los tenistas a seguir más de cerca en los próximos años. El jugador murciano no estaba por la labor de que saltara la sorpresa y, con un juego muy sobrio, fue imponiéndose a su rival que no podía o no sabía como hacer daño a Nico. Hay que destacar la seguridad al saque de la que hizo gala durante todo el partido Almagro que no cedió ni una sola oportunidad de break. Una única ruptura le valió para llevarse la primera manga por 6-3. En el segundo set Dolgoporov imprimió más fuerza en sus golpes, con un gran saque también que no dio opción a las roturas. Así, se llego a la tie-break, dónde la experiencia del español le valió para llevarse el segundo y definitivo set. De esta manera, alcanza su título número 8 de su carrera y continúa con el gran nivel del 2010.
Por su parte, Fernando Verdasco tenía la oportunidad de resarcirse de unos últimos meses no muy buenos para el jugador madrileño. El español se enfrentaba en la final del torneo de San José con una de las revelaciones del circuito masculino, el canadiense Milos Raonic. Intensísimo partido que se tuvo que dilucidar con dos tie-breaks que cayeron del lado de Raonic. Ambos jugadores dieron un gran espectáculo, con puntos muy buenos y disputados. Curiosamente el menos acostumbrado a finales es el jugador que demostró más tranquilidad en los momentos importantes de los dos sets, mientras el español tuvo sus opciones en ambos sets, pero en ninguno supo aprovecharlo. El dato importante para Verdasco es que empieza a recuperar el tenis que ofreció en la primera mitad del año 2010. Además tendrá la oportunidad de tomarse la venganza muy pronto, ya que el destino ha querido que ambos jugadores se enfrenten en su primer partido en el torneo de Memphis que se disputa esta semana.
En otro torneo, el de Rotterdam, el sueco Robin Soderling consiguió su segundo título consecutivo, después de una dura final que se tuvo que resolver en el tercer set contra el francés Jo-Wilfried Tsonga. El partido fue una demostración de saque por ambos tenistas, con gran cantidad de aces (20 el francés y 12 el sueco) que hizo que el partido transcurriera con puntos muy cortos. El sueco aprovechó una rotura para imponerse en el primer set por 6-3. El francés no se vino abajo y logró anotarse el segundo set por 3-6. En el tercer y definitivo set una nueva rotura permitió a Robin ganar el partido con un nuevo 6-3 en el marcador.
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